Yoga

Mucho es lo que se ha dicho y escrito sobre el Yoga siendo, bajo mi visión innecesario extenderse largamente en grandes explicaciones y disertaciones al respecto. Escuetamente comentar que Yoga es una palabra sánscrita que significa unión. Y por Unión se hace referencia a la unión entre el cuerpo, la mente y el espíritu. En el mundo actual un gran número de seres humanos se encuentran desbalanceados en este sentido, ya que hay una disfunción total entre sus diferentes dimensiones; por un lado su mente les induce hacia una dirección, su corazón siente otra diametralmente opuesta y su cuerpo no les responde como desearían siendo esta situación un caldo de cultivo para dolencias, malestares, depresiones, y en definitiva, infelicidad.

Con la ayuda de los ejercicios que se encuentran dentro de esta disciplina, cuyos orígenes se remontan más allá del año 5000 a.C, se consigue que paulatinamente estos aspectos contrapuestos y dispares se vayan acomodando entre sí y vayan encontrando el lugar correspondiente dentro de cada individuo. El Yoga trabaja básicamente a través de las posturas corporales llamadas “Asanas” que buscan el movimiento de la energía de modo óptimo por todo el cuerpo ayudando así a la salud integral de quienes lo practican. Estas posturas aportan elasticidad a los tejidos: facilitando así el riego sanguíneo, fortaleza interna a los músculos: evitando las lesiones y, lo más importante: paz mental ayudando enormemente a experimentar estado de dicha y confort.

A parte de los ejercicios puramente físicos, dentro del Yoga también se enmarcan multitud de ejercicios respiratorios llamados Pranayamas los cuales están directamente enfocados en paliar los procesos mentales, dando así unos preciados momentos de descanso a nuestro sistema nervioso y a nuestros incesantes pensamientos, ayudándonos a desconectar del mundo cotidiano para poder regresar a él más tarde con las energías renovadas y disponibles siendo así más eficientes en nuestros quehaceres.
En Xixirin el yoga se está convirtiendo en uno de los pilares de nuestra rutina diaria ya que cada mañana nos levantamos antes de la salida del Sol para poder practicar tod@s junt@s durante aproximadamente una hora. Este compromiso con nosotr@s mism@s nos ayuda a abrirnos al día con una mentalidad y una predisposición nuevas y frescas entrando de un modo alegre y sosegado en lo cotidiano.

Las sesiones que ofrecemos vienen de la fusión que, tras años de práctica, dos de estas ramas de esta ciencia milenaria, conocidas como Hatha Yoga y Kundalini Yoga, han encontrado bajo la experiencia de sus practicantes.

A grandes rasgos, la diferencia básica entre uno y otro es el dinamismo y movimiento constante de las Kriyas (encadenamientos de ejercicios) del Kundalini Yoga frente al enfoque más estático y de mantenimiento de las Asanas del Hatha Yoga, creando una complementación ideal y un trabajo más profundo en todos los sentidos y aspectos del ser humano. Quienes deseen más información pueden consultar el aparatdo “Que Ofrecemos” en la pestaña de “Yoga” en este mismo blog.
Un caluroso abrazo!!!
Xixirin.

Reiki

Reiki es una palabra japonesa cuya traducción viene a interpretarse como energía (Ki) cósmica (Rei) y hace referencia a la energía que está presente en la naturaleza y en todo y que, desde tiempos inmemoriales, muchas tradiciones han venido definiendo con nombres distintos; como es el caso de Prana para los Hindúes, Chi para los Chinos o Bioplasma para los estudios científicos llevados a cabo por la antigua Unión Soviética.

Este camino de autodescubrimento y sanación interior fue redescubierto por Mikao Usui, un profesor japonés del s.XIX, que tras una larga indagación y búsqueda interna llegó a conectarse con la fuente misma de esta energía y, desde entonces, ha sido una técnica que no ha cesado de difundirse y de llegar a todos los rincones del mundo.
Con el tiempo es un camino que ha ido evolucionando y actualmente se pueden encontrar varios linajes y modos que difieren ligeramente entre sí pese a que la energía con la que trabajan sigue siendo el Reiki mismo, es por ello que encontramos varias vías como son el Reiki Usui, el Reiki Tibetano,el Karuna, el Egipcio,… Desde mi punto de vista y para hacer un símil que nos ayude a entender estas ramificaciones y sus diferencias, podríamos decir que el Reiki sería el agua de un manantial puro e inagotable y las diferentes vías que han aparecido serían la marca de la empresa embotelladora y el tratamiento que se le ha dado a dicha agua para su consumo.

El modo que esta energía tiene para curar, sanar e impulsar los procesos evolutivos de cada quién se explican del siguiente modo: la persona que recibe la iniciación para conectarse con esta energía increíble recibe la capacidad de poder canalizar a través de las palmas de sus manos esta energía Reiki pudiendo, desde entonces, trasmitirse esta energía a si mismo y a otros con la finalidad de que su cuerpo físico, energético, emociones y pensamientos se armonicen. La iniciación la facilita una persona que previamente ha sido iniciada como maestr@ reiki, lo cual sucede tras haber completado cada uno de los niveles de la formación correspondiente. El recibir esta energía de un practicante reiki, armoniza todo el sistema energético de meridianos y chakras afectando de este modo a todo el cuerpo físico, mental y emocional, dejando a la persona equilibrada en todos sus niveles.
Como es sabido y constatado por la ciencia, las enfermedades tienen su origen en el mundo mental y emocional; cuando un nudo mental o emocional no se resuelve en su plano correspondiente, si perdura en el tiempo, puede llegar a manifestarse en el cuerpo físico como una dolencia u enfermedad. Reiki es una herramienta muy útil en este sentido ya que trabaja en estos planos sutiles antes de que la enfermedad se exprese en el cuerpo, solucionándolo previamente en el plano mental o emocional correspondiente antes de que el cuerpo deba limpiar la inarmonía a través de la enfermedad. En el caso de que la enfermedad ya esté plasmada, el reiki es una ayuda de incalculable valor como complemento a la medicina tradicional o incluso como tratamiento único pese a que las recuperaciones en este caso pueden requerir de constancia y tratamientos prolongados.
La facultad de canalizar esta energía queda muy lejos de ser una capacidad para unos pocos o un don de un limitado número de personas. De hecho, si los seres humanos estuvieran en paz consigo mismos y alineados con su realidad interna, el Reiki sería algo que fluiría de modo natural a través de ellos. El hecho de recibir la iniciación es una gran ayuda para llegar a esa paz y conectar con esa realidad interna gracias a la cual la persona se une a esta energía y puede hacer uso de ella cuando lo solicite.
En los últimos años multitud de estudios científicos han venido certificando los enormes beneficios que esta práctica proporciona en enfermos de oncología y como sus recuperaciones se han visto aceleradas y han sido menos traumáticas que las de aquellos pacientes que no reciben las sesiones. Es un servicio que ha venido instalándose en varios hospitales de toda la península española en los últimos tiempos siendo dirigido por grupos de voluntarios y de forma gratuita.
Los efectos que describen aquellas personas que practican esta disciplina o de aquell@s pacientes que han recibido sesiones son, entre otras, las de entrar en una tremenda paz interna, experiencias de profunda calma mental, aumento del sistema inmunológico, mayor resistencia a las enfermedades, mayor rapidez en la recuperación y curación de dolencias, expansión de la percepción sutil de la propia energía y resolución de antiguos conflictos mentales y emocionales.

Aquí en Xixirín, esta es una de las herramientas que varios de sus componentes vienen practicando desde hace varios años con unos resultados maravillosos y, por ello, ofrecemos sesiones individules y formación para aquellas personas que quieran iniciarse y experimentar los beneficios que esta energía pueda aportar en sus vidas.
Un Caluroso Abrazo!!!
Xixirín.

Compilar Kernel 3.6.5 sobre Debian Wheezy

El pasado 31 de octubre en Kernel.org publicaron la versión estable del kernel para GNU/Lnux en su versión 3.6.5. Como hoy ha sido una tarde lluviosa he aprovechado para compilarlo y echarle un ojo, mientras se cocinaban las castañas encima de la estufa de leña.

Los pasos que he seguido són los siguientes:

1. Instalar los componentes necesarios para compilar el kernel:

aptitude install fakeroot build-essential linux-headers-`uname -r` module-assistant libqt4-dev pkg-config kernel-package zlib1g-dev

1. Descargar la última versión estable del kernel. 3.6.5.

2. Descomprimir el kernel en la carpeta /home/tu_usuario/kernel/:

# tar xjvf linux-3.6.5.tar.bz2 /home/tu_usuario/kernel

3. Conocer el hardware de nuestro ordenador:

# aptitude install lshw

# lshw > /home/tu_usuario/hardware_equipo.txt

4. Iniciar la configuración

cd /home/tu_usuario/kernel/linux-3.6.5/

make xconfig

Y aquí viene la parte entretenida del tema. Nos aparece una interfaz gráfica con las partes del kernel preconfiguradas para funcionar en una amplia gama de ordenadores. Aquí es dónde entra nuestro arte, con la ayuda del archivo de hardware del equipo que hemos creado antes y armados de paciencia empezamos a leer las explicaciones que se dan en cada apartado. Así que según nuestro criterio vamos cambiando las opciones que creamos oportunas.

En mi caso he elegido el “procesador en el apartado processor type and features” he desactivado opciones relativas o otros procesadores. En el apartado “PCCard (PCMCIA/CardBus) support” he marcado solo la opción de 32-bits. En el apartado de drivers he dejado activo lo relativo a mi hardware y he desactivado el resto (ethernet, wireless, audio,…) ya que el proposito es optimizar este kernel para usarlo solo en este ordenador. Entre medio he ido desactivando otras opciones y modulos basándome en las descripciones que da el asistente de configuración.

5. Grabamos y cerramos el asistente xconfig

6. Ya podemos empezar la compilación, que puede durar varias horas en mi caso unas 2 horas en una máquina core 2 duo y 4 gb de ram.

# make-kpkg clean

# make-kpkg –initrd kernel_image kernel_headers

3.6.5

7. Una vez terminada la compilación de nuestro flamante kernel 3.6.5, observamos que en nuestro directorio de usuario tenemos dos paquetes *.deb que corresponden al kernel ya compilado i empaquetado correspondientes a nuestra arquitectura:

linux-headers-3.6.5_3.6.5-10.00.Custom_amd64.deb  i   linux-image-3.6.5_3.6.5-10.00.Custom_amd64.deb 

8. Instalamos

# cd /home/tu_usuario

# dkpg -i linux-*deb

9. Actualizamos nuestro grub:

# update-grub

10. Reiniciamos el equipo y en el grub elegimos la entrada de nuestro nuevo kernel y una vez en el escritorio comprobamos que estamos usando el kernel que acabamos de instalar:

# uname -a 

Está ha sido la trapallada informática en está tarde de lluvia. Hata mañan!